Una nota especial va para el Ammazzasuocere , un pecorino que es dulce al primer gusto pero con un final de alma picante al igual que su suegra aquí se revela de donde se eligió el nombre.
 Y precisamente porque el arte de cuidar el Fosse es herencia de unos pocos, grandes refinadores, Fossa Pellegrini representa su excelencia madurando en sus propios pozos que se remontan a 1200-1400, con el mismo método de esa época y en los lugares donde Se encuentra .Cárcel de Ramberto.
 El procedimiento contempla los pozos preparados a principios de agosto con la quema de paja para higienizar el ambiente; Luego se cubren los muros con paja sostenida por un andamio de cañas mientras, en el fondo, se colocan tablas de madera. El queso se debe sellar en bolsas de lona blanca marcadas con un número de identificación y, en este punto, se cierra el hoyo con tablas de madera y arena para ser reabierto en noviembre, tradicionalmente el día de Santa Catalina.